El comité de empresa informa (23/11/2004)
Tras la comunicación por parte de la Dirección de TRAGSEGA de la supresión de la cesta de Navidad, desde el Comité de Empresa de TRAGSEGA queremos hacer constar las siguientes consideraciones:
El obsequio de la cesta de Navidad, se ha recibido siempre con el sentir de agradecimiento de un detalle de la empresa con sus trabajadores. Por supuesto que no supone ninguna necesidad primaria a ningún trabajador, y su supresión no quebrará ninguna economía familiar. Podemos entender que como tal obsequio, es potestad de la Dirección entregarlo o no, pero la decisión unilateral de su eliminación no nos parece adecuada.
La utilización del gasto que suponían estos obsequios en beneficio de la Asociación de Victimas del 11-M, es una decisión en la que a todos los trabajadores nos hubiera gustado participar (y quizás hubiéramos corroborado), de forma que ese acto solidario surgiera, y se pudiera asumir, por todos los que renunciamos a ese obsequio, y no solo por la Dirección de la Empresa.
Por otra parte, si es el momento de hablar de solidaridad, quizás sea el momento de tratar la conveniencia de crear un Fondo Social de carácter asistencial que pueda cubrir diferentes necesidades de los trabajadores, como ya ocurre en TRAGSA. Se debería empezar por solucionar esas carencias internas antes de adoptar otros generosos compromisos externos.
En definitiva queremos hacer constar nuestro malestar por la toma unilateral de esa decisión, y la falta de información y transparencia con la que ha llevado este tema.
El Comité de Empresa TRAGSEGA-Madrid
Madrid, 23 de noviembre de 2004
El obsequio de la cesta de Navidad, se ha recibido siempre con el sentir de agradecimiento de un detalle de la empresa con sus trabajadores. Por supuesto que no supone ninguna necesidad primaria a ningún trabajador, y su supresión no quebrará ninguna economía familiar. Podemos entender que como tal obsequio, es potestad de la Dirección entregarlo o no, pero la decisión unilateral de su eliminación no nos parece adecuada.
La utilización del gasto que suponían estos obsequios en beneficio de la Asociación de Victimas del 11-M, es una decisión en la que a todos los trabajadores nos hubiera gustado participar (y quizás hubiéramos corroborado), de forma que ese acto solidario surgiera, y se pudiera asumir, por todos los que renunciamos a ese obsequio, y no solo por la Dirección de la Empresa.
Por otra parte, si es el momento de hablar de solidaridad, quizás sea el momento de tratar la conveniencia de crear un Fondo Social de carácter asistencial que pueda cubrir diferentes necesidades de los trabajadores, como ya ocurre en TRAGSA. Se debería empezar por solucionar esas carencias internas antes de adoptar otros generosos compromisos externos.
En definitiva queremos hacer constar nuestro malestar por la toma unilateral de esa decisión, y la falta de información y transparencia con la que ha llevado este tema.
El Comité de Empresa TRAGSEGA-Madrid
Madrid, 23 de noviembre de 2004
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